Colhue es una localidad ubicada en San Pablo, aproximadamente a 15 kilómetros de Osorno. En esta zona, Avifel adquirió un predio de 302 hectáreas (ha), de las cuales 23,2 serán reforestadas con bosque nativo, con el objetivo de asegurar el funcionamiento de los procesos del ecosistema en su conjunto y evitar la erosión de los suelos por las plantaciones forestales previas.
Según la legislación forestal del país, se exige la reforestación obligatoria después de una actividad de cosecha de plantaciones en terrenos de aptitud forestal. Estas reforestaciones son realizadas generalmente con especies exóticas idénticas a las cosechadas, como pinos y eucaliptus. Sin embargo, este proyecto busca reforestar con especies nativas que han sido afectadas por la acción del humano y que son vitales de proteger para perpetuar en el tiempo.
El proyecto de reforestación considera exclusivamente la plantación de 25.520 árboles de especies nativas como Coihue (N. Dombeyi), Roble (N. Obliqua), Raulí (N. Alpina) y Ulmo (E. Cordifolia). Con esta medida, Colhue completará las 100 ha. de bosque nativo, considerando que el predio ya contaba con 88 ha. de especies como coihue, boldo, lingue, entre otras.
La elección de estas especies responde a su a su alta capacidad colonizadora de suelo, idónea para preparar el terreno para el crecimiento de otras especies ya existentes naturalmente en el predio y que demandan más sombra. La combinación de las especies coihue, roble y raulí permite establecer rápidamente un bosque nativo, favoreciendo así el poblamiento y enriquecimiento con otras especies del área reforestada. Además, el efecto colonizador de las especies reforestadas permitirá que a su sombra se establezca un tipo de bosque valdiviano muy peculiar que combina roble, laurel y lingue (RLL), y que si bien abundó en nuestra zona hace siglos pasados, hoy es muy difícil de encontrar.
El incremento en la presencia de bosque nativo en la zona trae múltiples beneficios para la comuna, entre los que destacan la generación de corredores de biodiversidad para la flora y la fauna, la protección del ciclo del agua mediante la retención e infiltración, la protección del suelo evitando la erosión y sus consecuencias, la captación del concentrado de carbono emitido por la industrialización y sus procesos, además de mejorar la fertilidad del suelo, aumentando el aporte de materia orgánica.